– Hay un rumbo claro: recuperar la calidad educativa en Veracruz
Como lo marca la tradición política, es momento de hacer un recuento, los primeros 100 días de una administración son fundamentales para conocer las fortalezas y áreas de oportunidad que se tienen al frente de una responsabilidad pública.
Son claves para cualquier gobierno y mayormente para uno con visión comunicativa. Aprovechar estos días, significa construir la imagen de la institución y sobre todo, tener a la mano un termómetro directo del sentir ciudadano respecto al trabajo realizado.
Y es precisamente el trabajo lo que habla por sí solo en todas las esferas de la vida cotidiana.
Por lo tanto, hay que ser muy claros: la titularidad de la Secretaría de Educación de Veracruz, es una de las más altas encomiendas en el poder estatal, máxime la coyuntura en que la recibió Zenyazen Escobar García.
El profesor cordobés encontró una SEV acusada por actos de corrupción, autoasignaciones de plazas, abusos, disputas de organizaciones magisteriales, y un lastimoso olvido al sector docente, forjador invaluable de la niñez y juventud veracruzana.
Había que emprender acciones inmediatas, apremiaba establecer medidas contundentes para dar un golpe de timón y recuperar los asuntos educativos.
Zenyazen, fue descalificado injustamente por sus detractores y adversarios, aunque fue víctima de una persecución mediática no asumió en ningún momento un papel de mártir: se dedicó a dar resultados en cuanto asumió, no había de otra.
Convocó a los docentes, él proviene de ahí y conoce mejor que nadie sus luchas; en este período, estrechó un vínculo que nunca antes se había observado dentro de la dependencia, atendió a 35 de los 40 sindicatos, algunos en dos o más ocasiones.
Si bien parece increíble, los anteriores Secretarios habían evitado escuchar a nuestros maestros, conocer las demandas y peticiones del gremio es prioritario para entender las verdaderas necesidades de la educación.
Acorde a la nueva realidad pública, ordenó la auditoría que reveló, entre otras cosas, los abusos de poder de exfuncionarios como el otrora titular, Enrique Pérez Rodríguez, quien habría beneficiado a su gente cercana con cambios de nivel en por lo menos 77 plazas de estructura.
Resolvió una herencia de la anterior administración, decenas de maestros fueron vulnerados al emitirles cartas de presentación sin ostentar el techo presupuestal necesario para cubrir sus salarios, Zenyazen gestionó ante la Federación los recursos para evitar retrasos en los pagos, garantizando las clases de nuestros educandos.
En otro aspecto, ante la ola de violencia que ha cimbrado a Veracruz en los últimos años, coordinó la ejecución del programa “Amo mi escuela”, cuyo objetivo es, de manera interinstitucional, reforzar las acciones que involucren a la comunidad educativa en su seguridad.
También, hay que resaltar la puesta en marcha de “Escuela garantizada, escritura garante”, con la finalidad de brindar certeza jurídica y patrimonial a los más de 12 mil planteles que no tienen regularizada la propiedad de sus inmuebles.
En este primer centenar de días, ha tenido intensas giras de trabajo, visitando municipios como: Hueyapan de Ocampo, Catemaco, San Andrés Tuxtla, Alvarado, Pueblo Viejo, Perote, Banderilla, Agua Dulce, Cotaxtla, Yanga, Fortín, Coatzacoalcos, Nuevo Ixcatlán- Playa Vicente y Minatitlán.
El Secretario de Educación igualmente apostó por el programa “Estos Somos”, que pretende el rescate de las lenguas maternas. Muchos esfuerzos se han destinado a impulsar este apartado en el marco del Año Internacional de las Lenguas Indígenas.
Rebasamos apenas 100 días, sin embargo, ya podemos afirmar que el proyecto que encabeza Zenyazen Escobar tiene un rumbo claro: recuperar la calidad educativa de Veracruz.
@carloshdorantes
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