La creación de la Superliga europea de fútbol no ha sido precisamente bien recibida en Inglaterra. Desde el primer ministro hasta ex leyendas de la Premier, muchos han criticado la «avaricia» y el «egoísmo» del llamado Big Six a la hora de sumarse al proyecto presidido por Florentino Pérez. Tampoco los aficionados de estos clubes, que se han manifestado a través de sus trust, las organizaciones que les representan en cada entidad, entienden muy bien cuál es el sentido de dinamitar el modelo del fútbol actual.

. © PHIL NOBLE (REUTERS) . «El Chelsea Supporters Trust (CST) está horrorizado por el hecho de que el Chelsea se encuentre entre los equipos que se han apuntado a esta competición alternativa, y espera que todas las informaciones al respecto sean falsas», apuntaban desde el oeste de Londres antes del comunicado oficial. «Se trata de una propuesta que pone en riesgo que la institución se vea excluida de otras competiciones, poniendo así en riesgo el futuro del club. Se trata de una propuesta que solo pone de manifiesto la avaricia que rodea al mundo del fútbol, y, como aficionados, estamos cansados del abuso que se realiza de un deporte tan bonito como este».

En el norte de la capital, la opinión es parecida. «Desde el Arsenal Supporters Trust mostramos nuestra repulsa a la decisión del Arsenal de unirse a la Superliga europea, la cual representa la muerte de todo aquello que debería significar el fútbol. Queremos que nuestro equipo juegue en competiciones basadas en el mérito deportivo y en el equilibrio competitivo», apuntan. «No es una sorpresa que una decisión como esta se tome sin tener en cuenta a los aficionados».

Una crítica que también hacen los representantes de los aficionados del Tottenham: «No solo no se nos consultó a los aficionados, sino que se hizo sin el respaldo de otras partes importantes implicadas. La junta actual parece preparada para poner en riesgo la reputación del club y su futuro por una búsqueda oportunista motivada por la avaricia. Ya basta».

En el norte de Inglaterra, directamente se lo toman como un insulto. «Basar la Superliga en un cortijo cerrado para clubes ricos va en contra de todo lo que representa el fútbol y todo lo que debería defender el Manchester United. Hacerlo en medio de una pandemia sin consultar a los aficionados en un momento en que todos deberíamos apoyarnos mutuamente no solo es inaceptable sino también un insulto», apuntan los representantes de los red devils.

Y desde el Spirit of Shankly, que acoge a quienes apoyan a los reds: «Es una vergüenza. Como representantes de los fans nos oponemos completamente a esta decisión. Los dueños han ignorado a los aficionados en su avariciosa búsqueda de dinero. El fútbol es nuestro, no suyo. Nuestro club de fútbol es nuestro, no suyo». Los hinchas del Liverpool, por su parte, anunciaron que la grada mítica de Kop retirará sus banderas de Anfield.

Con información de AS