El presidente López Obrador acusó intereses que intentaron acusar a miembros del Ejército mexicano por el Caso Ayotzinapa
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que detrás de las acusaciones en contra de integrantes del Ejército mexicano por el Caso Ayotzinapa, hay intereses que buscaban una rebelión dentro de dicha institución.
“Hay intereses, buscaron reventar la investigación hablando de más personas, en el caso, por ejemplo, de los militares, responsabilizando a 20, cuando en la investigación son cinco, de alto grado, los otros 15. No sé, pero me imagino”, argumentó.
“Son soldados pero por qué meten a los veinte (acusados por la FGR), pensando que con eso se iba a generar una rebelión en el Ejército y que íbamos a dar marcha atrás. No, cero corrupción, cero impunidad”, puntualizó.
El mandatario mexicano rechazó que existan presiones del Ejército mexicano en el Caso Ayotzinapa, debido a que están muy conscientes de que en su Gobierno no se puede encubrir a quien comete un delito.
No (hay presiones del Ejército en Caso Ayotzinapa), eso también es parte de los rumores que difunden”, dijo.
“En las Fuerzas Armadas están muy conscientes de que no se puede encubrir a quien comete un delito, porque eso en vez de fortalecer a esa institución, la debilita, por eso hicieron mal al no actuar cuando sucedieron los hechos, a lo mejor pensando que se afectaba a las Fuerzas Armadas, no”, señaló.
El mandatario mexicano apuntó que desde el inicio de su Gobierno tiene el compromiso de revelar toda la verdad en la desaparición de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
“Emití un decreto para crear una comisión que investigara los hechos de Ayotzinapa y se detuviera a los responsables y en eso estamos. Cuando me presentaron el informe di la instrucción de que se procediera”, adujo.
“No se está excluyendo a nadie, como también se menciona, todos los que aparecen en el documento y en los anexos, pero sobre todo en el informe, se da a conocer que tuvieron responsabilidad, todos van a ser requeridos por la Fiscalía, si hay otros, pues también, siempre y cuando se tengan las pruebas porque se va actuar a partir del informe que presentó la comisión y en ese informe vienen los nombres de los presuntos responsables”, agregó.
La polémica sobre la desaparición de los 43 jóvenes, ocurrida el 26 de septiembre de 2014 en el estado de Guerrero, se ha reavivado tras el informe que presentó en agosto la Comisión para la Verdad, que concluye que fue un “crimen de Estado” y que no hay indicios de que estén vivos.
Con información de López-Dóriga Digital