La decisión era difícil, pero al final la joya que Heung-min Son se aventó contra el Burnley fue elegida como el mejor gol del año y terminó por llevarse el Puskas en la ceremonia de The Best 2020.
Aquella noche de diciembre, Son agarró el balón desde afuera delTottenham, dejó atrás a todos los jugadores del Burnley, entró al área del equipo rival y con la parte interna de su pie derecho venció a Pope.
Este gol de Heung-min Son venció al de Luis Suárez de taquito con el Barcelona y a la chilena que Giorgian De Arrascaeta se rifó con Flamengo, que completaban la tercia de goles finalistas para el Puskas 2020.
Con información de juanfutbol





























