Mako, hija del hermano menor del emperador Naruhito, soportó años de críticas y dilaciones sobre la propuesta de matrimonio de Kei Komuro, también de 29 años.
Según las normas de sucesión imperial en Japón, Mako perderá su título si se casa con un plebeyo. Además, su prometido sigue en el punto de mira, pues supuestamente su madre habría pedido dinero prestado a un antiguo prometido y no lo devolvió.
La expareja de la señora Komuro la acusa de quedarse con más de 4 millones de yenes (unos 35 mil dólares), suma que supuestamente le pidió prestada para financiar parte de la educación de su hijo.
La boda de la princesa Mako con Kei Komuro se había dado a conocer en el año 2017. Estaba prevista para llevarse a cabo en 2018, pero se pospuso por esta disputa financiera entre la madre de Komuro y su antiguo prometido.
Aunque Komuro le pagó al exprometido de su madre, la disputa aún no se ha resuelto y provocó un escándalo en Japón, donde se espera un comportamiento impecable de los miembros de la familia imperial.
Kei Komuro se marchó en 2018 a Estados Unidos para cursar la carrera de Derecho, decisión interpretada por Japón como un intento de aliviar la presión.
Se espera que la pareja se traslade a Nueva York después de la boda.
Con información de unotv