– “Tijeretear” el presupuesto sin fundamentos sólidos o plena comprensión de las necesidades legislativas, un capricho con fines políticos
Xalapa, Ver., 03 de octubre de 2018.- El presupuesto para el Congreso del Estado de Veracruz, para el ejercicio fiscal 2019, asciende a 790 millones 759 mil 800 pesos y representa un ajuste del 8 por ciento en relación con el que actualmente se ejerce, informó el presidente de la Junta de Coordinación Política, Sergio Hernández Hernández.
Este presupuesto fue integrado bajo el método de Planeación, Programación y Presupuestación y debidamente justificado, ya que atiende aspectos relacionados con la adecuada asignación de recursos a cada capítulo, a fin que las tareas que desempeña el Poder Legislativo continúen desarrollándose de manera ininterrumpida y se mantenga la calidad de los trabajos.
Debido a la importancia del capital humano en las tareas legislativas, se prevé los recursos económicos para cumplir con las obligaciones sindicales que, además representa una obligación, toda vez que existe la revisión anual del contrato colectivo, así como el pago al cuerpo de asesores, liquidaciones al personal de confianza, con lo que heredaremos una administración ordenada a fin que la nueva legislatura cuente con las herramientas financieras que les permitan implantar su estilo de trabajo.
En relación con la disminución presupuestal propuesta por el partido Morena, misma que no se acompañó de estudios sólidos que tomaran en cuenta las implicaciones, Hernández Hernández comentó: “Veo en Morena y su jefe político, Cuitláhuac García, un interés por debilitar al Poder Legislativo y la oposición, para así allanarse el camino en el Poder Ejecutivo”.
Me permito precisar punto por punto las propuestas que pretendía el Grupo Legislativo de Morena durante la sesión y que por mayoría del Pleno fueron rechazadas, toda vez que no corresponden a la realidad.
Primero: Para aplicar una disminución del gasto de las percepciones de los trabajadores, es necesario precisar que hay conquistas sindicales que por ley deben acatarse. Ir en contra podría constituir una ilegalidad.
Segundo: Sobre reducir el monto del Subsidio Legislativo, representaría que las 40 Comisiones Permanentes no cuenten con los recursos necesarios para apoyarse de capital humano experto en la materia, así como para la organización y desarrollo de foros, reuniones y demás temas conforme a la naturaleza de cada instancia.
Tercero: Los seguros de gastos médicos son una prerrogativa que está en la ley y, si se desea prescindir de él, corresponde a la siguiente Legislatura reformar la legislación y así quitar este derecho. Además, es una prestación que garantiza seguridad y certidumbre sobre el cuidado de la salud.
Cuarto: Bajar el monto para Materiales y Suministros implicaría dejar de garantizar la aplicación de la Ley General de Archivos y afectar el gasto de papelería de los grupos legislativos (que se espera sean más que en la actual), además de los requeridos por las recién creadas Unidad de Transparencia y Contraloría Interna, pieza fundamental del engranaje jurídico del Sistema Estatal Anticorrupción.
Quinto: Bajar el rubro de Transferencias, Asignaciones y Subsidios, establecido en el artículo 8, fracción X del Reglamento para el Gobierno Interior del Poder Legislativo y el artículo 17, fracción V de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, debilitaría las funciones de fiscalización y gestión de los diputados al privarse de poder realizar eventos y reuniones en su distrito, abrir oficinas de atención ciudadana, incumpliendo así, sus labores de contrapeso en relación con los otros dos poderes.
Por último, invito a Morena a que actúen como lo hemos hecho nosotros, de forma responsable y transparente, ya que no se trata de debilitar al Poder Legislativo y crear un gobernante supremo que tome unilateralmente las decisiones, sino de verdaderos contrapesos que fortalezcan nuestra democracia.
