La Arquidiócesis Primada de México informó que el Arzobispo emérito Norberto Rivera continúa grave; sin embargo, precisó, ha reportado mejorías durante la semana.
Mantenemos la invitación a orar por su salud y la de quienes están sufriendo a causa de esta pandemia”, manifestó por la agrupación religiosa.
El Arzobispo emérito Norberto Rivera continúa grave, sin embargo, ha reportado mejorías durante la semana. Mantenemos la invitación a orar por su salud y la de quienes están sufriendo a causa de esta pandemia.
— Arquidiócesis Primada de México (@ArquidiocesisMx) January 25, 2021
El pasado 16 de enero, la Arquidiócesis Primada de México informó que Norberto Rivera había sido hospitalizado por complicaciones derivadas del COVID-19.
Días después, la Arquidiócesis aseguró que fue decisión del cardenal atenderse en un hospital privado, por lo que deberá costear los gastos tras su contagio por COVID-19.
Aquellos obispos y sacerdotes contagiados de COVID-19 que deseen llevar el seguimiento de su enfermedad a través de otros medios pueden hacerlo, con recursos propios”, indicó.
Rivera Carrera estuvo al frente, desde 1995, de la Arquidiócesis de México. En 2017 cumplió los 75 años, razón por la que, de acuerdo con el Derecho Canónico, presentó su renuncia al papa Francisco.
Originario de La Purísima, Tepehuanes, Durango, fue designado arzobispo primado de México el 13 de junio de 1995, por el papa Juan Pablo II, y asumió la encomienda el 26 de julio de 1995.
Tras su renuncia, ha ostentado el cargo de Cardenal Emérito, que mantendrá hasta que muera.
Con información de López-Dóriga Digital
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