El volcán Cumbre Vieja de La Palma no sólo ha generado miles de postales entre los habitantes de las Islas Canarias y que han sido compartidos en todos lados, sino también ha sido uno de los fenómenos más fotografiados desde la vista satelital.

Vista satelital de la erupción del volcán Cumbre Vieja en las Islas Canarias, España. (Reuters)© Proporcionado por Milenio Vista satelital de la erupción del volcán Cumbre Vieja en las Islas Canarias, España. (Reuters)La erupción en curso, que comenzó el 19 de septiembre, ha producido una columna de aire que ha estado ascendió rápidamente porque ser más cálido y, por lo tanto, menos denso que sus alrededores. Sin embargo, lo que más cautiva es el río de lava que es visible desde el espacio. 

La Agencia Espacial Europea (ESA) ha estado compartiendo las imágenes del río de lava, que no ha dejado de fluir. Estas imágenes han sido captados por el satélite Sentinel-2 del programa Copérnico, en que según la ESA, es el más ambicioso de la historia para observar la Tierra.

De acuerdo con la agencia espacial europea, el programa Copérnico realiza el monitoreo de muchas actividades de la tierra, con el propósito de  «proporcionar información precisa, actualizada y de fácil acceso para mejorar la gestión del medio ambiente, comprender y mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad ciudadana», menciona la ESA.

La ESA asegura que los satélites tienen varias herramientas para el entendimiento de las erupciones volcánicas como los sensores atmosféricos que «pueden identificar los gases y aerosoles liberados por la erupción, así como cuantificar su impacto medioambiental más amplio».

Añadió que el satélite Sentinel-5P puede «monitorear el dióxido de azufre, el aerosol y las cenizas emitidas por las erupciones volcánicas y seguir su movimiento a través de la atmósfera».

Desde medir las emisiones de gases contaminantes hasta evaluar los daños, los satélites del programa Copernicus han estado aportando datos cruciales para las autoridades y los servicios de Protección Civil de España.

El Servicio de Gestión de Emergencias de la red Copernicus ofrece mapas que han permitido observar la evolución de la lava diariamente y evaluar los daños en viviendas gracias a la cartografía de precisión

«Esta erupción volcánica demuestra cómo los datos de Sentinel pueden apoyar diferentes servicios operativos del programa Copérnico. Las mediciones de dióxido de azufre de Sentinel-5P pueden ser utilizadas por el Copernicus Atmospheric Monitoring Service para ayudar a las compañías de aviación a evitar encuentros con cenizas volcánicas y columnas de dióxido de azufre», aseguró Claus Zehner, director de la misión Sentinel-5P.

Con información de Milenio