El presidente López Obrador indicó que el Gobierno se encuentra en Acapulco, Guerrero, con la situación controlada, pese a saqueos
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, desmintió que las autoridades estén completamente rebasadas tras la devastación ocurrida en Guerrero, tras el paso del ciclón Otis.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador indicó que el Gobierno se encuentra en Acapulco, con la situación controlada, donde además detalló el número de funcionarios y personal militar que están presentes para atender la emergencia ocasionada por la devastación.
Sí (el Gobierno tiene control en Guerrero), sí claro (desmiente que autoridades estén rebasadas)”, aseveró.
“Estamos allá en Acapulco, hay como 10 mil elementos de las Fuerzas Armadas y muchos trabajadores sociales, trabajadores del Bienestar, técnicos, deben de haber como mil 500 o 2 mil trabajadores de la CFE, deben de estar manejando como 300 equipos especiales, camiones para restablecer el servicio de energía eléctrica y hay también médicos, brigadas todos están ayudando”, agregó,
El mandatario mexicano anunció que no habrá un toque de queda, derivado de los actos de rapiña ocasionada por una parte de la población: “no, porque la gente va a ayudarnos mucho”.
En redes sociales se han viralizado imágenes y testimonios de saqueos en tiendas y comercios en Acapulco, donde varios ciudadanos se llevan no solo comida y agua, sino también televisiones, refrigeradores, estufas, lavadores, motocicletas entre otros artículos que no son de primera necesidad.
Tras el paso del huracán Otis, en Acapulco, Guerrero, ciudadanos aprovecharon para cometer actos de rapiña en diferentes establecimientos. #ALasTres con @noeliajmz | #SiempreEnVivo | Sigue la señal en vivo por https://t.co/R0rtaHzqZe pic.twitter.com/nK2KCeL3w0
— Foro_TV (@Foro_TV) October 25, 2023
El tabasqueño justificó los saqueos al señalar que había una situación de emergencia e incertidumbre tras la destrucción, pero informó que ya hay retenes de la Guardia Nacional para mantener el orden en Guerrero.
“Había una situación de emergencia, de desorden, caos, mucha incertidumbre, miedo, todo esto cundo sucede una tragedia de estas dimensiones, fue muy fuerte el impacto del huracán, la verdad yo tenía mucha preocupación no por los daños materiales sino por las vidas, porque o material de una u otra forma se resuelve, pero las vidas humanas cómo se recuperan y eso era mi preocupación principal”, aclaró.
López Obrador acusó una nueva campaña de desprestigio por parte de sus adversarios, tras la devastación del ciclón Otis en Guerrero.
Hay toda un campaña de desprestigio, pero tenemos un escudo que nos protege: la confianza del pueblo en nuestro Gobierno, si no, ya no estaríamos aquí, porque están muy enojados los potentados corruptos y sus achichincles, así en lo irracional”, arremetió.
“Imagínense eso de dar a conocer que habían muerto, si nadie sabía, no había ni siquiera comunicaciones, por falta de luz, no sé cuántas personas en el IMSS (muertas), adelantarse a eso, o lo del Fonden, estaba pasando el huracán todavía con afectaciones y con daño, pero ya diciendo ‘no hay Fonden’, o sea el problema es el Fonden”, expresó.
“Muy irracionales, entonces hay que tenerle paciencia. Pedirle a la gente que no se crea todo lo que escuchan, porque son muy mentirosos, muy falsarios, y calumnian. No es nada más México, es una crisis mundial de cómo los medios en vez de informar con objetividad con profesionalismo, manipulan, se dedican a decir mentiras, son grandes fábricas de mentiras, y no es un asunto espontáneo, de falta de profesionalismo, no, no, no, es algo bien planeado, con propósitos de control y manipulación”, lanzó en el Salón Tesorería.
El huracán Otis causó 27 muertos y cuatro desaparecidos tras impactar como categoría 5 la madrugada del miércoles en Acapulco, uno de los principales destinos turísticos del país.
Otis, que ingresó el miércoles al estado de Guerrero, rompió el récord de intensificación de un ciclón en México, al pasar de tormenta tropical a huracán categoría 5 en menos 12 horas, algo “atípico” y “poco probable”, que los pronósticos internacionales “no preveían”, según la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana
Con información de López-Dóriga Digital
