Los padres de un bebé de cuatro meses encontrado muerto en el fondo de un pozo, fueron arrestados bajo sospecha de asesinato.
El pequeño Dylan Groves, fue severamente golpeado y enterrado dentro de una caja grande de leche llena de rocas y un ancla de hierro.
El cuerpo del bebé fue descubierto envuelto en bolsas de plástico y cobijas en el fondo de un pozo de nueve metros en Otway, Ohio, el pasado junio.
Ahora los padres Daniel y Jessica Groves, de 41 y 39 años respectivamente, fueron acusados de su asesinato.
Según los informes, Susan Brown, forense del condado de Montgomery, el bebé había sufrido fracturas en el cráneo, la pierna izquierda y el brazo izquierdo, además de tener metanfetamina y anfetamina en su cuerpo cuando murió.
La pareja está acusada de asesinato, secuestro, poner en peligro a niños, alterar evidencia, asalto criminal y abuso grave de un cadáver.
Ambos niegan los cargos en su contra.