Los conflictos internos en el Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional (PAN) salieron de control a tal grado que, ignorando las órdenes del Tribunal Electoral Veracruzano (TEV), el dirigente interino Omar Miranda Romero convocó a sesión extraordinaria para reincorporar a José Mancha en el cargo.
Militantes del partido blanquiazul repudiaron la estrategia empleada por el debilitado grupo yunista, que se enfrenta a una dura oposición encabezada por el médico cirujano, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés.
El respaldo de Omar Miranda, diputado local, entraña otro asunto prioritario. Mantener a toda costa, la coordinación del grupo parlamentario del PAN en el Congreso del Estado.
Fuentes del Palacio Legislativo aseguran que el diputado Enrique Cambranis Torres, quien a lo largo de esta LXV Legislatura ha mantenido un bajo perfil, estaría por encumbrarse como coordinador de la bancada panista, en relevo del diputado Sergio Hernández Hernández, famoso por los excesos en los que incurrió durante la Legislatura pasada, cuando ocupó la presidencia de la Junta de Coordinación Política.
En ese periodo, Hernández, quien mantuvo su curul por la vía plurinominal, fue acusado por una diputada de su mismo partido, de negarle recursos para los eventos propios de sus comisiones, pero sí emplearlos para la organización de fiestas, alcohol y mujeres.
En breve, los panistas de Veracruz celebrarán un nuevo proceso interno para elegir a su dirigente, esta vez sin el respaldo del aparato gubernamental que amparó a Mancha durante el Yunato. Esta vez van por la libre y en contra de un candidato que se perfila como futuro dirigente estatal del PAN, Joaquín Guzmán Avilés.
