• La comunicadora que a los 21 años recibió el Premio Nacional Juvenil de Periodismo, aspira a dirigir el Centro de Estudios para la igualdad de Género y Derechos en el Congreso del Estado de Veracruz.
Juan Pablo Armas
Comunicóloga y feminista, doctoranda en Investigación de la Comunicación, Mónica Mendoza Madrigal es una profesionista veracruzana independiente con una larga trayectoria. Muy joven, a los 21 años, recibió el Premio Nacional Juvenil de Periodismo y desde entonces no ha parado en lo que ella considera su pasión, escribir, comunicar, explicar la realidad.
Al lado de ese trabajo, que ha desarrollado desde la trinchera de diversos medios, en la comunicación institucional en los tres niveles de gobierno y como consultora, Mónica Mendoza ha luchado por la igualdad de género en Veracruz, convencida de que es una causa que le ha comprometido y le ha dado un sentido a su existencia.
Aspirante a dirigir el Centro de Estudios para la igualdad de Género y Derechos en el Congreso del Estado, la comunicadora habla a Espejo del poder sobre estas convicciones personales y de las motivaciones existenciales que tiene para seguir luchando por los derechos de las mujeres.
—20 años de compromiso y de lucha por la igualdad de género en Veracruz, ¿por qué esa convicción, qué te ha motivado en la vida para abrazar esa causa?
“Yo creo que todas las personas deberíamos tener causas que nos comprometen. Las causas se convierten en motivos que hacen que la labor cotidiana, tenga sentido. Sin embargo, las causas no tienen siempre una razón que las motiva. En todo caso, obedecen a una convicción. En el caso mío yo siempre recibí una educación muy intelectualizada y sin duda alguna ello me formó como mucho más sensible a los temas sociales y políticos. Y el feminismo es una causa política. Yo no sabría identificar en qué momento comencé a inclinarme a favor de la causa de las mujeres, lo que tengo claro es que todo mi desempeño profesional ha ocurrido en forma paralela a mi crecimiento como feminista”.
—¿Qué piensas de los feminicidios?
“Son el rostro más cruel de la injusticia. Es el homicidio de quien sabe que su crimen permanecerá impune, y por eso lo comete. Es un acto de odio, de poder y de venganza. Y es el clamor de una sociedad que cada vez siente que el miedo de perder a una de sus integrantes, está más cerca”.
—¿Cuál consideras que deba ser la estrategia a seguir para atender la Alerta de Género que vive Veracruz?
“Acatarla. Hasta ahora ninguno de los actores involucrados ha asumido las recomendaciones que las Alertas indican con mucha precisión. Ni la primera alerta por feminicidio, ni la segunda por agravio comparado han sido acatadas por parte de los actores e instituciones involucrados. Las Alertas necesitan tomarse en serio ya”.
—¿Crees que la lucha para garantizar la igualdad y defender a las mujeres debe estar fuera de cualquier color e ideología?
“La lucha por garantizar la igualdad y la defensa de las mujeres forma parte de la agenda de la protección a los derechos humanos, y los derechos humanos son universales y no están sujetos a interpretaciones ideológicas. Hay espacios para la ideología y la práctica de todos sistemas de creencias, pero su espacio no debe significar una violación a los derechos humanos”.
—¿Por qué aspirar a la Dirección del Centro de Estudios para la igualdad de Género y Derechos en el Congreso del Estado?
“Porque es un espacio de acompañamiento a la labor que realizan las y los diputados y su trabajo resulta sustantivo para poder hacer una gran diferencia entre legislar para mejorar las condiciones de vida de las mujeres en la entidad, o simplemente no hacerlo”.
